Bella y misteriosa a partes iguales. Dulce como los dátiles del desierto. Así soy yo, Dubai. Soy una joven marroquí educada y seductora, una mujer que sabe convertir cada minuto compartido en un pequeño oasis lleno de risas, relax y gratas sensaciones. Quienes me conocen y tratan no tardan en hacerse adictos a mí. Y es que yo guardo la llave que abre la puerta de los mejores paraísos con los que podemos soñar.