Hola. Soy Jade, una colombiana con nombre de piedra preciosa, cariñosa, atenta, dulce y muy elegante. Quienes miran mi cuerpo dicen que se asemeja a un reloj de arena. Puede ser. Al fin y al cabo, algo innato en mí me hace ser propietaria del tiempo. Quienes están conmigo pierden la noción de él y se creen sumergidos en un paraíso en el que todo es puro presente y en el que pasado y futuro dejan de importar. Dulce como sólo podemos serlo las mujeres latinas, siempre dejo huella.