La vida puede vivirse de muchas maneras. Yo, aunque joven, hace ya tiempo que decidí vivirla intentando aprovechar al máximo todas las ocasiones que ella nos brinda para gozarla a lo grande. Y en eso estoy. Me llamo Lin, soy venezolana, y como buena mujer latina estoy llena de vitalidad, energía, buen rollo y ganas de pasarlo bien. Para ello, nada mejor que sentirme bien acompañada por amigos que, como yo, estén abiertos a la aventura. Cuando encuentro amigos de ese tipo, soy la mujer más feliz del mundo y doy lo mejor de mí: todo mi cariño, toda mi dulzura, todo lo que pone a mil mi corazón. Quien está conmigo en ese momento no me olvida jamás.